La ministra Tereza Cristina Dias acusó a la modelo Gisele Bundchen de manchar la imagen del país en el extranjero. Durante una entrevista de radio, Dias calificó a la supermodelo como una “mala brasileña” por denunciar la deforestación y dijo que la modelo debería promover la agricultura y las industrias de Brasil.
Ante ello, la supermodelo brasileña convertida en activista ambiental escribió una respuesta mesurada en la que decía que “anunciaría con gusto acciones positivas” que se emprendan para el desarrollo sostenible.
En su carta Bundchen dijo que le sorprendió la mención negativa sobre ella. Agregó que sus críticas, las cuales incluían una serie de tuits el año pasado, se basaban en la ciencia y provenían de “una ciudadana brasileña preocupada”.
Al mencionar un aumento de 13% en la deforestación en Brasil, Bundchen dijo que todos aquellos detrás de las ocupaciones ilegales de terreno eran los “malos brasileños”.
La discusión pública subraya la enorme atención internacional que se ha puesto sobre la cuenca del Amazonas y los temores de que la administración del presidente Jair Bolsonaro se encamine a reducir las protecciones ambientales.
Brasil es el hogar de la mayor parte de la Amazonia, selva tropical más grande del mundo, y es considerado una pieza clave para combatir el cambio climático. Pero Bolsonaro, un aliado cercano de la agroindustria brasileña, ha provocado la ira de los defensores ambientales del mundo por su visión acerca de la zona que considera debería ser menos regulada para permitir agricultura y otras industrias.
Bundchen exhortó a Dias a usar tecnología y conocimiento científico en la agricultura brasileña para evitar una mayor deforestación que podría llevar a Brasil a pasar el “punto de no retorno”.
