Con una disminución de más de 16 mil trabajadores, la paraestatal Petróleos Mexicanos pretende obtener ahorros en gasto corriente, todo como parte de su Programa de Anual de Austeridad en el Gasto y Uso de Recursos para el Ejercicio 2019, lo que implica ajustar la planilla de trabajadores y que sus recursos humanos se concentren en áreas “más rentables”.
Pemex cerró el ejercicio fiscal 2018 con 128 mil 21 empleados, y para llegar a su meta de reducción de personal se deshará de poco más de 16 mil plazas para lograr su meta de 111 mil 855 trabajadores, tanto sindicalizados como de confianza, en el presente año, con fines presupuestarios.
De acuerdo con la información para servicios personales, recibirá tres mil millones menos que el año pasado, luego de que el Consejo de Administración de Pemex le fijó un techo presupuestal.
Entre las medidas administrativas adoptadas por una de las empresas nacionales más grandes de México, de aplicación no solo inmediata, sino también obligatoria para ella y sus empresas productivas subsidiarias, sin que esto ponga en peligro la seguridad de las instalaciones, los trabajadores y los niveles de productividad, así como la continuidad de las operaciones están: gastos de servicios personales, optimización de la plantilla laboral en negocios rentables del Corporativo y las Empresas Productivas Subsidiarias; en cobertura por ausencias que se dan por incapacidades, faltas injustificadas, comisiones, tiempo extra en áreas no operativas.
Por cuanto a viáticos se refiere, se reducirán viajes a seminarios, congresos, conferencias, aprovechando los recursos tecnológicos de comunicación; se reducirá el número de acompañantes, no viajarán en primera clase ni clase de negocios, entre otras.
