Las inclemencias del clima no fueron impedimento para que los seguidores de los Chiefs de Kansas City celebraran el primer triunfo del equipo en el Super Bowl en 50 años.
Los fanáticos se arremolinaron a lo largo de un tramo de 3,2 kilómetros (2 millas) para seguir el desfile y agradecerles a sus héroes del fútbol americano por llevar al trofeo Vince Lombardi de regreso a Kansas City, lo que cortó una sequía de títulos que inició después de que los Chiefs ganaron el Super Bowl IV en 1970.
El entrenador Andy Reid agradeció a la afición por su continuo apoyo y por acudir al desfile y sentenció “El próximo año regresaremos aquí”, “Una vez más, una vez más”.
Por su parte, el quarterback Patrick Mahomes, Jugador Más Valioso del Super Bowl y quien se convirtió en favorito del público durante su tercera temporada en la NFL, tenía la voz ronca, pero dijo que este campeonato cumplió con dos metas que se había fijado cuando se convirtió en titular.
Primero, comentó, quería traer de regreso el trofeo Lamar Hunt a Kansas City por ganar el campeonato de la Conferencia Americana. El fallecido Hunt y su familia fundaron el equipo como los Texans de Dallas en 1960, antes de mudar la franquicia a Kansas City en 1963 y cambiarle el nombre.
La segunda cosa más importante que quería hacer era “ganar el trofeo Lombardi para dedicárselo al mejor entrenador de todos los tiempos, Andy Reid”, añadió.
Varios jugadores incluyendo a Chris Jones, Tyrann Mathieu y Travis Kelce se bajaron de los autobuses de doble piso para chocar las manos los aficionados y bailar en la calle. Reid descendió para mostrar el trofeo Lombardi a la muchedumbre a lo largo de la ruta.
