Real Madrid y Chelsea firmaron un intenso empate a un gol en el primer partido de las semifinales de la UEFA Champions League, disputado en el estadio “Alfredo Di Stéfano”.
Christian Pulišić adelantó a los ingleses y Karim Benzema empató para los madrileños, en un partido que se jugó la mayor parte del primer tiempo bajo intensa lluvia.
La primera parte fue digna de una semifinal de Champions. El Chelsea salió enchufado y con un plan bien estudiado que supo llevar a la práctica. Presión intensa, anular los espacios de su rival y salir rápido para hacer daño.
El gol de Pulišić fue la recompensa al buen planteamiento de Thomas Tuchel. Pero el Madrid tiró de orgullo y con más casta que ideas supo meterse de nuevo en el partido. Adelantó líneas, Vinícius empezó a encontrar más espacios y Benzema apareció cuando su equipo le necesitaba. Avisó el francés con un zurdazo al palo y luego empató el partido tras un control perfecto y una volea inapelable a la media hora.
La intensa lluvia marcó el último tramo del primer acto, pero en la segunda parte dejó de llover y el choque recuperó la efervescencia de los primeros compases.
El Chelsea quiso repetir el guion de los primeros minutos del partido, pero el Madrid salió mejor colocado, juntó mucho más sus líneas y eso le permitió robar más y mejor el balón. En la recta final del partido, y tras cambiar a un 4-3-3, los blancos tuvieron mucho más el balón, aunque no pudieron transformar la posesión en un gol que les diera ventaja de cara a la vuelta en Stamford Bridge.
