Pese a ser un país que lo consideran vulnerable Mongolia es uno de los últimos países de cultura nómada, sin embargo no ha registrado muerte alguna a caso del coronavirus.
Desde que en Ulán Bator recibieron las noticias de su vecino (China) no dudaron en absoluto.
Iniciaron el cierre de escuelas desde el 24 de enero así como el cierre de fronteras y suspensión de todo viaje aéreo internacional, ferroviario o por carretera, aunado a esto se canceló la celebración del Tsagaam Sar (el año nuevo lunar mongol).
Cuentan con un registro impresionante de sus 3,2 millones de habitantes hasta el 12 de julio con un registro de 230 casos, 202 pacientes recuperados y 0 defunciones. información tomada del Banco Mundial Montsdame.
Lograron una atención oportuna aplicando:
- sistemas de vigilancia para toda la sociedad
- líneas directas de comunicación
- sistema de rastreo
- sesiones informativas
- uso obligatorio del cubrebocas para todos los ciudadanos, funcionarios y trabajadores.
- lavado constante de manos
- cumplimiento de los ciudadanos de las medidas
Por supuesto que estas medidas tan extremas desde “un inicio” no han sido bien vistas por otros países ya que al cerrar las fronteras muchos de sus ciudadanos se quedaron varados, así como el extremismo de sus medidas.
Sin embargo pese a lo que refieran los gobiernos y la misma OMS Mongolia tomó el mando desde un primer instante permitiéndose salvaguardar la vida de muchos de sus pobladores a diferencia de otros países que lo dejaron esperar y ahora se encuentran en la encrucijada de hospitales saturados y continúan con el creciente número de casos.
