Insistiendo en mantener la cautela, se anunció por parte de Shinzo Abe, primer ministro japonés, el levantamiento del estado de emergencia por la pandemia del coronavirus en las últimas regiones del archipiélago en que seguía vigente, incluida Tokio.
“Hemos tenido un criterio muy estricto para levantar el estado de emergencia. Juzgamos que cumplimos con ese criterio. Hoy levantaremos el estado de emergencia en todo el país”, dijo Abe en una conferencia de prensa.
Fue a partir del 7 de abril cuando dio inicio el estado de emergencia tan solo en Tokio y seis regiones más para después ampliarlo a todo Japón ante la rápida aceleración de casos diarios de COVID-19 desde fines de marzo.
Aunque inicialmente esta medida fue prevista hasta el 6 de mayo, se prolongó hasta el 31 de mayo, pero debido a el descenso de nuevos casos se levantó de manera anticipada en 39 de las 47 prefecturas del archipiélago el 14 de mayo; el jueves fue levantada en Osaka y Kioto.
Sin embargo el Primer Ministro pidió prudencia y adaptarse a “una nueva normalidad”: “Si bajamos la guardia, la infección se propagará rápidamente (…) debemos mantenernos atentos”, advirtió. “Es necesario crear una nueva forma de vida, debemos cambiar nuestra manera de pensar a partir de ahora”.
