Los incendios que se han suscitado en Australia han dejado tres muertos, más de 150 hogares destruidos y miles de personas desalojadas de sus viviendas.
Varias personas están desaparecidas y al menos unas 30 resultaron heridas.
Ante la inmensidad de los incendios, el gobierno ha planteado la posibilidad de enviar al ejercito a apoyar a los 1,300 bomberos.
El fuego se extiende a lo largo de 1,000 kilómetros en el litoral del pacifico.
El gobierno anunció un programa de ayuda financiera de 690 mdd para luchar contra las consecuencias de la sequía.
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