Un estudio liderado por la Institución Federal de Telecomunicaciones arrojó conclusiones sobre cómo afecta a niños el consumo tecnológico. El reporte declara que los juegos violentos van en contra del respeto humanitario y la dignidad humana.
El contenido violento de los juegos también representa un riesgo alto, debido a que muchos les enseñan a los niños lo “divertido” de matar.
La investigación aportó que las redes sociales y principalmente los youtubers que sube. Los vídeos jugando este tipo de juegos son de importancia en la influencia y la aceptación de estos juegos en niños. El IFT consultó a psicólogos para confirmar si el consumo de “streaming” ocasiona una alza en la producción de dopamina y explicó que la sobreestimación da respuesta a cuadros de hiperactividad.
Estas entre otras conclusiones son tajantes y dan a entender que los juegos violentos sí afectan en gran parte el desarrollo de los niños. Esto crea algo de polémica entre los que defienden esto y los que declaran que los juegos violentos son para parar el tiempo y la principal característica en la educación de los hijos es en medida de los padres.
