Por la emergencia sanitaria en el país, en junio el indicador de confianza del consumidor disminuyó 11.7 puntos. La caída es reflejo del impacto de la crisis en las percepciones sobre la situación económica, las posibilidades presentes de los integrantes del hogar de realizar consumo de bienes duraderos y la condición económica del país, alertó el Reporte económico del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP).
Desde marzo, el indicador ha mostrado una evolución desfavorable, principalmente por el inicio de la Jornada Nacional de Sana Distancia y las medidas de confinamiento social ante la pandemia.
Por ello, el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) –percepción actual y las expectativas a futuro que tiene la población acerca de su situación económica, la de su familia y la del país– refirió que, durante junio, la confianza cayó a 32 puntos debido a la percepción desfavorable de los consumidores de la situación económica actual de los miembros del hogar comparado con la que tenían hace 12 meses (-13.3 puntos) y la percepción sobre la situación económica del país hoy en día, comparada con la de hace un año (-12.6 puntos).
El CEFP –dependiente de la Cámara de Diputados– indicó que la Encuesta Telefónica sobre Confianza del Consumidor, realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, señaló que la opinión sobre las posibilidades presentes de los integrantes del hogar de realizar consumo de bienes duraderos –muebles, televisores, lavadoras, aparatos electrodomésticos, etcétera– registró -11.5 puntos, la percepción sobre la condición económica del país dentro de un año respecto a la vigente disminuyó -11.4 puntos, y la situación económica de los miembros del hogar en el último año respecto a la existente cayó a -9.8 puntos.
