Servicios de emergencia moscovitas han declarado que la ola de amenazas falsas de bomba continuó en esta capital, con advertencias de que habían sido colocados este tipo de artefactos, en la Catedral de Cristo Salvador, así como en el centro comercial Gorod.
De igual forma, y para abonar más a un escenario de incertidumbre, en la noroccidental San Petersburgo siguió la llegada de amenazas de bombas que inició desde el pasado 10 de noviembre, también sin resultados concretos.
Cabe resaltar que en la catedral ortodoxa a unos cuantos cientos de metros del Kremlin, la amenaza resultó falsa en el tercer incidente similar en menos de una semana, señalaron las fuentes a la agencia rusa de noticias Itar.
También se dieron hechos semejantes en la tienda departamental Tsnetnoi del centro comercial Gorod, ubicado en el sureste de Moscú, donde fueron desalojadas unas mil 300 personas para hacer la revisión de las instalaciones pero sin resultados firmes.
La serie de amenazas de bombas comenzaron en la capital rusa el pasado 28 de noviembre, con desconocidos advirtiendo de que han sido colocados artefactos explosivos en edificios judiciales, escuelas y centros comerciales todos ellos falsos, según los informes que proporcionó Itar Tass.
Lamentablemente otras regiones del país han tenido esta clase de advertencias,: en San Petersburgo más de 12 escuelas, hospitales y edificios judiciales recibieron las amenazas de explosivos este lunes. Las advertencias que más llamaron la atención fueron las que se referían al museo del Hermitage y al aeropuerto Pulkovo, el cuarto en materia de tránsito en toda Rusia.
