El expresidente de Perú, Alan García, falleció tras pegarse un tiro en la cabeza cuando iba a ser detenido por casos de corrupción.
El exmandatario fue trasladado al hospital Casimiro Ulloa en Lima, a donde llegó en situación crítica y pese a los intentos, los médicos no lograron salvarle la vida.
El exmandatario iba a ser detenido para enfrentar cargos por presuntos sobornos pagados por Odebrecht.
Medios locales que tuvieron acceso a la tomografía que se le practicó al exmandatario y que fue la difundida en redes sociales, confirman que se disparó en el cráneo, a la altura de la sien.
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