El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, rechazó el controvertido proyecto de reforma a la ley del banco central que pondría en peligro la autonomía de la entidad al obligarlo a comprar divisas que los bancos comerciales no pueden ingresar al sistema financiero.
Los defensores del proyecto de ley, aprobado por el Senado a inicios de diciembre, argumentaron que ayudaría a los mexicanos con limitado acceso al sistema financiero, como las familias de migrantes y trabajadores del sector hotelero, a los que les paga en dólares.
Sin embargo, el banco central condenó la iniciativa, diciendo que era una afrenta a su autonomía, podría obligarlo a absorber dinero de cárteles del narcotráfico y pondría en riesgo su reputación ante autoridades financieras internacionales.
Herrera dijo que si bien la ley podía haber sido bien intencionada, no iba a ayudar a solucionar el problema, propinando uno de los revés más fuertes del Gobierno a la iniciativa.
“Lo único que iba a hacer esta propuesta es trasladar el problema que tenían estos bancos comerciales al banco central, porque el banco central hubiera tenido el mismo problema: cómo exportar estos dólares”, dijo Herrera a Reuters en una entrevista.
El funcionario señaló que el 99.3% de las remesas llegaron a México a través de canales financieros formales no en efectivo.
Si es un problema de 0.7%, es un problema que podemos resolver a través de mecanismos operativos (…) y no necesariamente pasa por hacer un cambio a la ley del Banco de México”, consideró el funcionario.