La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) emprendió una ofensiva directa contra la cadena de videojuegos Gameplanet, tras detectar irregularidades en contratos, precios y derechos de los clientes, lo que derivó en la clausura temporal de varias sucursales en la Ciudad de México.
La acción se originó el 13 de octubre, cuando inspectores de la Subprocuraduría de Telecomunicaciones detectaron anomalías en la tienda Metrópoli Patriotismo. De acuerdo con el reporte oficial, múltiples establecimientos no exhibían el contrato de adhesión registrado ante la autoridad, omitían entregar copia al consumidor ni mostraban la carta de derechos mínimos, además de carecer de precios visibles, una falta grave según la Ley Federal de Protección al Consumidor.
“El consumidor debe conocer lo que paga, lo que firma y lo que le corresponde”, señaló una fuente de Profeco, subrayando que la transparencia es una obligación ineludible.
Las verificaciones se extendieron del 14 al 21 de octubre a tiendas ubicadas en Plaza Universidad, Galerías Insurgentes, Forum Buenavista, Perisur, Zona Rosa, Parque Delta, Plaza Oasis Coyoacán y Parque Tezontle. De ellas, cinco fueron clausuradas —Plaza Universidad, Galerías Insurgentes, Forum Buenavista, Perisur y Zona Rosa—, mientras que Parque Delta y Plaza Oasis Coyoacán aprobaron la inspección sin observaciones.
En los locales sancionados, Profeco colocó sellos de suspensión de actividades, impidiendo su operación hasta nuevo aviso.
Gameplanet respondió con un comunicado en el que aseguró haber iniciado acciones correctivas, como la implementación de Códigos QR para acceder a contratos y derechos del consumidor, la actualización de su portal web y la creación de carpetas documentales que acrediten su cumplimiento legal.
Durante una revisión reciente, la sucursal de Parque Tezontle fue verificada nuevamente y se confirmó que ya cumple con los cinco puntos exigidos, por lo que la dependencia evalúa levantar las medidas precautorias.
Profeco advirtió que la vigilancia al comercio especializado en tecnología y videojuegos continuará, con el objetivo de garantizar prácticas justas y transparentes. “Ni siquiera los videojuegos se salvan del game over cuando se incumplen los derechos del consumidor”, subrayó la institución en un mensaje que no deja lugar a dudas.
