La Secretaría de la Contraloría General de la Ciudad de México abrió una investigación contra el gobierno de Miguel Hidalgo, encabezado por Mauricio Tabe, por posibles actos de corrupción vinculados con un inmueble ubicado en LaFontaine 110, colonia Polanco.
De acuerdo con el oficio SCG/DGCOICA/DCOICA “B”/OICMH/JUDI/0519/2025, la Contraloría notificó a la presidencia del Congreso capitalino sobre la apertura del expediente administrativo OIC/MH/D/0084/2025, en seguimiento a un punto de acuerdo aprobado por el Pleno en septiembre pasado. Este documento solicita indagar presuntas faltas administrativas cometidas por servidores públicos adscritos a la alcaldía.
Entre los señalados se encuentran el alcalde Mauricio Tabe Echartea, junto con César Garrido, Esther Alicia Martínez y José David Rodríguez Lara, responsables de las áreas de Asuntos Jurídicos, Registro y Autorizaciones, y Servicios Urbanos. Todos son investigados por su presunta participación en la reactivación de una obra que excedió los niveles permitidos en su construcción.
El caso tiene antecedentes. La Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) ya había detectado violaciones al uso de suelo, incluyendo la construcción de un piso adicional que debía ser demolido desde 2019. Sin embargo, el proceso se detuvo tras un amparo promovido por la empresa desarrolladora.
Las irregularidades se remontan al periodo en que Xóchitl Gálvez era delegada (2015–2018), cuando se permitió la demolición total del inmueble pese a que el permiso solo contemplaba una remodelación.
La investigación de la Contraloría busca esclarecer si hubo omisiones o complicidades en la reactivación de la obra. Más allá del edificio en Polanco, el caso vuelve a poner sobre la mesa la vigilancia del desarrollo urbano en zonas de alto valor y los límites de la rendición de cuentas en las alcaldías capitalinas.
