La Alcaldía Iztacalco clausuró un desarrollo inmobiliario ubicado en Calle Vainilla 234, en la colonia Granjas México, tras detectar que la obra no cumplía con las medidas de mitigación de riesgo exigidas por la normatividad vigente. La intervención fue realizada por la Dirección Ejecutiva de Asuntos Jurídicos, en coordinación con personal del Instituto de Verificación Administrativa (INVEA), luego de que se evidenciaran afectaciones visibles en la zona.
El proyecto contemplaba la construcción de 149 departamentos distribuidos en ocho niveles y dos sótanos, pero la falta de muros de contención y puntales estructurales generó hundimientos, grietas en vialidades y daños al arbolado urbano, comprometiendo la seguridad de vecinos y transeúntes. Las autoridades señalaron que el desarrollador incumplió las condiciones establecidas en su licencia, además de los acuerdos asumidos con residentes afectados por los daños.
La licencia de manifestación de construcción, otorgada durante la administración anterior, tenía vigencia del 19 de junio de 2024 al 19 de junio de 2027. Sin embargo, la alcaldía determinó que el proyecto no solo incumplió con las reparaciones prometidas, sino también con los compromisos de mitigación acordados para reducir el impacto urbano.
Durante la verificación, el personal actuante se entrevistó con la persona encargada de la obra, quien fue puesta a disposición de la autoridad ministerial por el delito de quebrantamiento de sellos de suspensión, tipificado en el Código Penal de la Ciudad de México. La Dirección Ejecutiva de Asuntos Jurídicos ya realiza las gestiones ante la Fiscalía de Investigación Territorial en Iztacalco para dar seguimiento al caso.
Ante las irregularidades detectadas, la alcaldía informó que se iniciará un procedimiento de nulidad del registro de la obra, ya que se comprobaron violaciones al Reglamento de Construcciones de la Ciudad de México. En consecuencia, el inmueble permanecerá clausurado por motivos de seguridad, impidiendo que el desarrollador continúe con las labores.
La administración local subrayó que estas acciones buscan proteger la integridad de las y los iztacalquenses y garantizar que los nuevos proyectos inmobiliarios se desarrollen bajo normas de seguridad, transparencia y responsabilidad urbana, evitando que el crecimiento desordenado ponga en riesgo a la comunidad.
