La edición 2025 del Gran Premio de la Ciudad de México no solo fue un espectáculo deportivo de clase mundial, sino que también representó un impulso histórico para la economía local. Según estimaciones de la Canaco CDMX, el evento generó una derrama económica récord cercana a 20,892 millones de pesos, un incremento de 16.47% respecto a 2024, beneficiando a hoteles, restaurantes, comercios y plataformas de hospitalidad comunitaria.
Durante la semana del evento, la ocupación hotelera promedió 90% en zonas cercanas al Autódromo Hermanos Rodríguez y alrededor de 72% en el resto de la ciudad. Además, miles de visitantes eligieron Estancias Turísticas Eventuales (ETEs), principalmente en las alcaldías Iztacalco, Benito Juárez y Cuauhtémoc.
Juan Pablo González, embajador en CDMX de la Asociación de Profesionales en Administración de Rentas (APAR), señaló que las ETEs complementan la infraestructura turística, redistribuyen el ingreso y fortalecen la economía barrial.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Viviendas Turísticas (AMVITUR), la ciudad cuenta con aproximadamente 27 mil viviendas turísticas, que generan más de 22 mil millones de pesos anuales y 66,800 empleos, de los cuales 48,800 son directos. Además, el 90% de las personas anfitrionas recomienda comercios locales, por lo que cada peso gastado en alojamiento genera tres pesos adicionales en consumo en barrios y negocios vecinales.
Cifras de ediciones anteriores indican que 72% de los turistas fueron nacionales, confirmando que la hospitalidad de la CDMX es de mexicanos para mexicanos y que el turismo deportivo también fortalece la economía interna.
Ángel Torres, vocero y fundador de Todos Somos Anfitriones, destacó que la Fórmula 1 demuestra lo que la ciudad puede lograr cuando comunidad, autoridades y sector turístico trabajan juntos, y agregó que la hospitalidad comunitaria será clave rumbo al Mundial 2026.
