El operativo de inteligencia en Sonora terminó con la caída de dos viejos conocidos del Cártel del Pacífico. Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, confirmó la detención de Abdel “N”, alias El Toro, de 63 años, y de su supuesto sucesor, Miguel Ángel “N”, alias El Torito, ambos integrantes de la célula criminal Los Rusos.
Los agentes federales ejecutaron dos cateos en las colonias Reforma y Jalisco, en San Luis Río Colorado, donde localizaron droga, armas, cartuchos y tres vehículos. Las investigaciones revelaron que El Toro controlaba el tráfico de metanfetamina, cristal, heroína y cocaína en la zona, además del movimiento de armamento.
El presunto capo ya tenía antecedentes por homicidio y lesiones, y mantenía su base de operaciones en Sonora, territorio clave en la ruta del Pacífico. Las autoridades montaron vigilancias fijas y móviles para seguir a la célula, hasta reunir pruebas suficientes para que un juez autorizara la intervención de los domicilios.
Tras su captura, El Toro y El Torito fueron informados de sus derechos y entregados al Ministerio Público. Mientras tanto, el mensaje del gobierno federal fue claro: el clan de Los Rusos sigue en la mira, y su cadena de mando comienza a fracturarse.
