La presidenta Claudia Sheinbaum presentó el inicio de las Farmacias del Bienestar, un nuevo esquema que permitirá a quienes participan en el programa Salud Casa por Casa recoger sus medicamentos sin costo y sin pasar por las largas filas habituales de los centros de salud. La idea es sencilla: pequeños módulos instalados afuera de estas unidades médicas y también dentro de las Tiendas del Bienestar, donde las personas podrán recibir directamente los fármacos recetados.
El programa comenzó su despliegue en el Estado de México con 500 módulos en operación. Según la mandataria, este modelo permitirá agilizar la entrega y evitar la saturación en las farmacias tradicionales, además de acercar los servicios a comunidades donde el acceso suele ser limitado. El plan avanza con paso acelerado: se prevé que para marzo del próximo año haya Farmacias del Bienestar operando en todas las entidades del país.
Un video presentado durante la conferencia explicó que esta primera etapa marca el arranque de una red que crecerá hasta cubrir las 32 entidades federativas, con la promesa de garantizar el abasto gratuito de medicamentos vinculados al programa.
Detrás del anuncio, aparece un mensaje político claro: reforzar el acceso universal a tratamientos y cerrar la brecha que por años ha afectado a quienes dependen del sistema público. El reto será sostener el abasto, evitar rezagos y demostrar que esta expansión no solo es un despliegue inicial, sino un cambio duradero en la forma en que se distribuye la salud en México.
