La ruta legal de Hernán Bermúdez Requena volvió a cerrarse. El exsecretario de Seguridad Pública de Tabasco, identificado como “Comandante H” o “El Abuelo” y señalado como presunto líder del grupo criminal La Barredora, permanecerá recluido en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, luego de que la justicia federal rechazó concederle el amparo solicitado.
La resolución fue emitida por Sandra Adriana Carbajal Díaz, titular del Juzgado Primero de Distrito en Tabasco, quien negó la protección judicial contra la prisión preventiva y la vinculación a proceso que pesan sobre Bermúdez Requena desde septiembre pasado, dentro de la causa penal 213/2025. Los cargos que enfrenta son asociación delictuosa, extorsión y secuestro exprés, delitos considerados de alto impacto.
En su recurso, el exfuncionario —quien colaboró con el entonces gobernador de Tabasco, Adán Augusto López Hernández— argumentó que su encarcelamiento vulneraba derechos fundamentales como la libertad personal, el debido proceso y la presunción de inocencia. También sostuvo que su vinculación a proceso carecía de sustento, al considerar insuficientes las pruebas presentadas por la autoridad.
Sin embargo, la jueza desestimó estos planteamientos. En su análisis, concluyó que los elementos aportados por la Fiscalía General de Justicia de Tabasco resultan adecuados y suficientes para sostener las acusaciones, por lo que calificó los agravios como infundados y mantuvo vigentes las medidas dictadas en su contra.
Aunque Bermúdez Requena aún tiene la posibilidad de impugnar esta decisión ante un tribunal colegiado, el fallo marca un momento clave en el proceso. El caso no sólo mantiene bajo la lupa a un exalto mando de seguridad estatal, sino que también reaviva el debate sobre la responsabilidad de quienes, desde el poder público, terminan vinculados con estructuras criminales. La resolución deja claro que, al menos por ahora, el proceso seguirá su curso desde una celda de alta seguridad.
