El domingo pasado un presunto miembro de La Unión fue detenido al ser sorprendido con un “diablillo” donde transportaba dos cuerpos descuartizados.
Los cuerpos pertenecían a dos menores de edad, identificados como Yair de 12 y Héctor Efraín de 14 años de edad, mismos que fueron identificados por sus familiares.
Ambos eran hijos de indígenas mazahuas de San Antonio Pueblo Nuevo, Estado de México, desde pequeños se acompañaban en las horas de trabajo como ayudantes de sus padres comerciantes ambulantes.
De acuerdo con los mensajes encontrados en el celular de Héctor, él se comunicaba con una joven que le prometía una relación y por la que competía con un vendedor de droga.
Aunque sospechaban que habían iniciado con la venta de droga, la familia piensa que ambos fueron ejecutados por la relación con la joven.
La madre de Yair comentó que su hijo buscó a la joven para decirle que iría a la tienda a combarle una gelatina, por lo que salió de la vecindad acompañado de Héctor, pero ya no volvieron a saber de ellos.
Yair y Héctor fueron vistos por última vez el martes 27 de octubre afuera de la vecindad donde vivían, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Las pruebas forenses advirtieron que los menores fueron torturados y mutilados, aunque desconocen cuándo fue.
Los familiares exigen justicia por el asesinato de sus hijos. Hoy la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum comentó durante su conferencia de prensa que apoyará a los familiares de los dos menores.
#EnVivo ?? Nuestro compromiso es fortalecer el derecho a la movilidad integrada y sustentable. Por ello, iniciamos el proceso de ordenamiento de la movilidad de barrio.https://t.co/Qrn3SXCW1Q
— Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) November 4, 2020
