Luego de saberse ganadora de un sorteo, una mujer de Nuevo Hampshire interpuso una demanda ante la Comisión de Lotería para permanecer en el anonimato, y es que el premio consiste en nada menos que 560 millones de dólares.
La ley de Nuevo Hampshire, señala que el nombre del ganador de la lotería, la ciudad y el número de boletos comprados son registros públicos, pero la afortunada en cuestión aseguró que revelar su nombre “constituiría una invasión significativa de su privacidad”. Solo que cometió el “gran error” de firmar el reverso del boleto con su nombre verdadero al comprarlo.
Según la demanda, a la que tuvo acceso el diario local “The New Hampshire Union Leader”, la ganadora del sorteo firmó el reverso de su boleto de lotería sin darse cuenta de que su privacidad se perdió para siempre.
El abogado de la mujer informó que aún no ha cobrado el premio por esta disputa legal.