Los aranceles a la importación de acero y aluminio anunciados por Donald Trump, causarían daños no solo fuera del país, sino también a la economía estadounidense, advirtió el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Habrían repercusiones en la fabricación y construcción, que son los principales usuarios de aluminio y acero, indicó en un comunicado el portavoz del FMI, Gerry Rice.
El FMI no detalló los daños económicos que podrían crearse; en la actualidad está inmerso en su proceso de actualización de previsiones económicas globales antes de las reuniones de abril de sus 189 países miembros.
El FMI alentó al gobierno estadounidense y a sus socios comerciales a trabajar de forma constructiva en reducir las barreras comerciales y resolver los desacuerdos sin recurrir a lo que consideró medidas de emergencia.
El anunció de Trump sobre imponer aranceles del 25% al acero y del 10% al aluminio de algunos países, generó inquietud incluso entre los legisladores de su propio partido.
La Unión Europea apuntó a la posibilidad de adoptar contramedidas; Francia indicó que los aranceles serían inaceptables, y China instó al mandatario republicano a mostrar contención. Canadá, el mayor proveedor de acero y aluminio de Estados Unidos, dijo que tomará represalias si resulta afectado.
