El juez Artemio Zuñiga decidió decretar prision preventiva justificada a Emilio Lozoya Austin ante la petición de la FGR por la posibilidad de que pudiera darse a la fuga. La propia FGR argumento que el hecho de que Lozoya había sido captado cenando en un restaurante de lujo no se ajusta al comportamiento de una persona sujeta a proceso penal.
“Su comportamiento, es sabido, que se encontraba en un restaurante, no se ajusta al comportamiento de una persona sujeta a proceso penal, y si bien no tiene un impedimento, su presencia en el restaurante es una provocación a las instituciones públicas, porque ha sido interpretado por la ciudadanía que ciertas personas imputadas en casos sensibles pueden obtener unas medidas cautelares y otras no. Él tenía obligación de un comportamiento diverso al que ha venido reflejando”, afirmó ayer Antonio López García, representante en la audiencia de la Unidad de Inteligencia Financiera”.
En la declaración ratifica que el imputado no realizó algún hecho para violar las condiciones de su libertad; no trató de fugarse, no cometio algun delito, pero el simple hecho de que fue visto en un restaurante generó opiniones mediática que llevó a la FGR a cambiar de postura y decidió decretar prisión preventiva.
