Por medio de una charla del presidente de Corea del Sur, Moon Jae In y el primer ministro, Kim Boo Kyum, han considerado la posibilidad de prohibir por completo el consumo de carne de perro, ya que esta practica de consumo es cada vez escasa en el país.
Un gran porcentaje de surcoreanos mencionan que nunca han consumido carne de perro, y este consumo ha decaído mucho en el país. Por tanto, los mercados principales de carne de perro han tenido que ir cerrando poco a poco debido a que el consumo ya es escaso, cabe mencionar que se ha mencionado que aproximadamente un millón de perros son sacrificados para su consumo cada año.
Pese a que los mayores consumidores de carne de perro son las personas mayores, estos poco a poco han dejado de consumirlo, y aunque hay ciertos restaurantes que manejan platillos con esta carne, su consumo ha disminuido.
El presidente Moon ha declaro públicamente que es fan de los perros, pero que esa no es la razón por la que plantea una posible prohibición de su consumo, sino que esta idea surge por un debate sobre las nuevas medidas para proteger a los animales abandonados.
De acuerdo con informes y encuestas realizadas en 2020 por Nielsen para la Sociedad Internacional Humana, informó que un 84% de los surcoreanos nunca han probado carne de perro y por tanto aseguran que no desean consumirla, a esto se llegó con una hipótesis de que el 60% de surcoreanos apoyarían la prohibición del consumo de esta carne.
Pese a que hay una ley que prohíbe el sacrificio cruel de perros y gatos, no menciona nada sobre el consumo de su carne. Desde la Defensa de los Derechos de los Animales de Corea (ONG), Jeon Jin Kyung menciona “Cada vez más surcoreanos consideran el consumo de carne de perro un abuso contra los animales más que una tradición”.
Además en el país los perros se han vuelto populares, pues son cada vez más los Idol’s que tienen uno y por tanto la población los ve como más cotas que como consumo, a esto se le añade que se ha insistido en cerrar restaurantes y mercados que vendan carne de perro.
