El huracán Isaías tocó tierra en la noche del lunes en Carolina del Norte, en el sureste de Estados Unidos, como huracán categoría 1, con vientos sostenidos de 140 km/h, dijo el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
Los meteorólogos advirtieron contra fuertes lluvias y peligrosas marejadas ciclónicas. Ello implica que “existe el peligro de inundaciones que amenazan la vida debido al aumento del agua moviéndose tierra adentro desde la costa, señaló el NHC. También instó a la población en las zonas con aviso de huracán -desde South Santee River, en Carolina del Sur, hasta Surf City, en Carolina del Norte- a “tomar todas las medidas necesarias para proteger la vida y la propiedad debido al aumento del agua y la posibilidad de otras condiciones peligrosas”.
Aunque se degradó a tormenta tropical tras tocar tierra, los destrozos ya causaron al menos un muerto. Los vientos formaron tornados y destruyeron un parque de casas rodantes en el condado de Bertie. Además de una víctima fatal, tres personas estaban desaparecidas, dos de ellas menores de edad.
El presidente Donald Trump dijo más temprano en una conferencia de prensa que había declarado emergencia en Florida y las dos Carolinas, lo que permite liberar fondos federales.
“Todos deben permanecer alertas”, advirtió. “Animo a todos a seguir las pautas de las autoridades estatales y locales”, cuyos lineamientos han sido “muy precisos hasta ahora”. “Así que manténganse a salvo”, agregó el mandatario.
Se mueve en dirección norte-noreste con una velocidad de 26 km/h y los vientos de tormenta tropical se extienden desde su centro hasta 205 km.
El NHC ha emitido una advertencia de huracán para un área entre el río South Santee, en Carolina el Sur, y Surf City, en Carolina del Norte.
