Derivado de la implementación de “fotocívicas“, el Gobierno de la Ciudad de México reubicará 138 cámaras de fotomultas. El secretario de Movilidad, Andrés Lajous, explicó que anteriormente, las cámaras tomaban la foto de los autos a gran velocidad y las enviaba “en paquete” a la Secretaría de Seguridad Pública, cuyo personal de Tránsito debía analizar los datos para confirmar o no que el conductor rebasó la velocidad.
Dicho procedimiento resultó engorroso e inútil, pues en algunos casos, el descarte de fotomultas era del 90 por ciento, por lo que una vez que termine el contrato, el 31 de diciembre, con las dos empresas que capturaban las imágenes, se dejará de trabajar con ellas.
El nuevo sistema tendrá dos objetivos, el primero se enfocará a evitar los atropellos en los alrededores de escuelas, con pantallas que señalen a los conductores la velocidad a la que van y a la que deberían ir. De 200 instituciones públicas que participarán en el programa, 20 serán las primeras beneficiadas.
La segunda parte consiste en reubicar 138 cámaras de fotomultas en los corredores que registran los más altos niveles de incidentes viales.
Además, en los primeros 100 días de Gobierno se intervendrán 35 cruces peligrosos en la Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyoacán, Cuauhtémoc, Iztacalco, Iztapalapa y Tlalpan, donde se colocarán más señalamientos, semáforos, se mejorará la carpeta asfáltica y se harán adecuaciones en guarniciones y banquetas para beneficiar al peatón.
