Padre y madrastra de tres menores de edad fueron detenidos por violencia familiar y tentativa de homicidio, después de agredir a los niños en su domicilio ubicado en la colonia Santa Lucía, delegación Álvaro Obregón.
Los gritos y llantos de los infantes alertaron a los vecinos, los cuales, al ver los golpes y amenazas del padre a uno de los menores con un cuchillo, reportaron el hecho a las autoridades. Minutos después, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México arribaron al lugar para verificar el reporte.
Los menores se encontraban desnudos y presentaban golpes, por lo que el padre y madrastra fueron detenidos.
Los niños de dos, cinco y nueve años de edad comentaron que sus padres se separaron y que desde ese momento no tienen información del paradero de su madre; también externaron que no acudían a la escuela, ni tenían autorización de salir de casa. Ahora los menores se encuentran al resguardo de la PGJ-CDMX.
#InformaPGJ El padre y la madrastra de tres niños fueron vinculados a proceso por tentativa de homicidio y violencia familiar https://t.co/LBM0srQ3GG pic.twitter.com/p4mEAMlidr
— Fiscalía CDMX (@FiscaliaCDMX) March 5, 2018
Un médico legista señaló que las lesiones tardarán en sanar en menos de 15 días, aunque igual tienen heridas en proceso de cicatrización; por su parte, el perito de psicología dictaminó que los niños presentan afectación psicológica, ocasionada por la violencia que vivían con su padre y su madrastra.
La fiscal de Niños, Niñas y Adolescentes, Maribel Mayer, de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, informó que un Juez de Control calificó como legal la detención de los imputados y que los vinculó a proceso, al padre se le impuso como medida cautelar la prisión preventiva oficiosa; mientras que a la madrastra le decretaron prisión preventiva justificada, ambos vinculados a proceso por tentativa de homicidio y violencia familiar.
El hombre podría alcanzar hasta los 32 años por tentativa de homicidio y violencia familiar; la mujer alcanzaría una condena de 6 años, por violencia familiar equiparada.
